El hombre de los sombreros
El hombre de los sombreros Hoy escojo mi sombrero con delicadeza, me apetece ser alguien alto y sofisticado. Escojo el sombrero blanco y me transformo en un señor de clase alta, elegante y rico, un hombre de negocios, que a pesar de ser muy rico no es feliz. Mañana seré un taxista, con una vida ajetreada, que se pasea con el coche por la ciudad, soñando con lo que hubiera pasado si hubiera aspirado a más. Y el lunes escogeré la boina violeta y me convertiré en una joven soñadora que empieza su carrera como cantante y que se pasea por París esperando encontrar su media naranja en alguna cafetería. El martes escogeré el verde, un sombrero de señor humilde, de una persona que a pesar de tener poco es feliz con lo poco que tiene y cuya familia lo cuida porque está enfermo y no le queda mucho tiempo de vida. Y el miércoles... el miércoles cogeré el naranja y me transformaré en un niño, pero no cualquier niño, un niño huérfano pero con esperanza, la esperanza de reencontrarse con sus padre